lunes

Tienes miedo

Yo sé, tu también tienes miedo...sí tienes miedo de enamorarte de mí verdad? me lo dice tu mirada, me lo dicen tus dedos cuando buscan mi espalda en la oscuridad, me lo dice tu boca cuando se acerca a la mía con la excusa de contarme algo, me lo dice tu voz, tu piel, tu pelo, tus uñas, tus dientes y me lo aseguraron tus brazos cuando me abrazaron y no querían soltarme y me contaron un secreto...que todo tu cuerpo quería un beso.


Pero sí yo lo sé tienes miedo de quererme mucho!


De lo que tengo miedo es de tu miedo. William Shakespeare

9 comentarios:

Mario_ergosum dijo...

¿Por qué es que tenemos al amor?, ¿por qué si nuestra plenitud está en él?

Típico Hombre de Mal Morir dijo...

Aunque el placer es la antesala al dolor el tener miedo a enamorarnos o por lo menos intentarlo es atentar a nuestras emociones tan hermosas y quiza jamas conocidas por uno mismo... hay que morir de amor... que rico es el amor... el primer beso... y el miedo de dar ese beso antes prohibido o inalcanzable...

¨•·.·´TATI`·.·•¨ dijo...

Porq sera q me IDENTIFICO con tu post... yo tambien tengo miedo... a TOMAR esa deciscion... no le tengo miedo a EL, pero se q el me teme a MI!...
MIEDO... cinco palabras q nos paralizan....
Este post me IDENIFICA

SALUDOS:.... ;)

gringotico dijo...

Algo me recuerda este post...

Jean Hakunna Matatta dijo...

SABES? ANTERIORMENTE YA HABIA LEIDO ESTA ENTRADA EN TU BLOG, PERRO NO ENTENDIA SU MIEDO...

JAJAJA NUNCA ME LO IMAGINE, PERO SI ES ASI COMO SE SIENTE EL REALMENTE, LO ENTIENDO A LA PERFECCION... ES UNA ANGUSTIA NO PODER DISIMULARLO, Y TAMBIEN LO ES TENERLE SCERCA Y ALEJARLAS AL MISMO TIEMPO

AUNQUE EN TU LUGAR, SI NO SE DECIDE PRONTO, DEJADLE, INDEPENDIENTEMENTE DE QUE REACCIONE O NO

sALUDOS!!!!

Jean Hakunna Matatta dijo...

Espero veas este post, te tengo un obsequio

http://yingyangjean.blogspot.com/2009/08/el-misterio-de-la-chistosisima-trinidad.html

César González dijo...

Da miedo lo que no conocemos. Cadavez que viene Amor hay que levantar castillos en países desconocidos, confiando en la buena voluntad de sus habitantes, sin dejar de llevar en nuestras espaldas y pechos, brazos y piernas las cicatrices (psicatrices también) de las antiguas batallas y de los castillos derrumbados.
Todos soñamos alguna vez con vivir esa Fata Morgana, ese castillo en las nubes.

Cin dijo...

Da miedo empezar, pero ya envuelto hay que soltar las amarras y navegar.

Anónimo dijo...

pue si, eso era.........